La sed de crecimiento de Geely no se detiene y va camino a convertirse en un gigante automotriz como lo es General Motors para Estados Unidos o Volkswagen en Alemania. Luego de adquirir Volvo, Proton, Lotus e inclusive una participación en Daimler, la compañía creada por Li Shufu está analizando la posibilidad de convertirse en el accionista mayoritario de su par china Lifan.
Así lo señala la agencia de noticias Reuters, que sostiene que la compañía fundada por Li Shufu y que posee Volvo, Proton, Lotus y acciones en Daimler tiene en vista a Lifan como su próximo objetivo. La idea sería reposicionarla como un fabricante de vehículos accesibles y eléctricos.
Según la agencia de noticias Reuters, Zhejiang Geely Holding Group –su nombre completo- tiene como objetivo reconvertir a Chongqing Lifan Holdings en una automotriz orientada a la producción de vehículos más accesibles y de mayor volumen, complementando su propia oferta y la de la innovadora Link&Co formada junto con Volvo.
La idea resulta lógica y sería una estrategia similar a la que implementó, por ejemplo, Volkswagen con Sköda y Seat, posicionándolas como las marcas más accesibles del consorcio. Pero la meta de Shufu va un paso más allá e implica no sólo a vehículos convencionales con motores de combustión, sino a 100% eléctricos. En este punto, nuevamente hay que tomar como ejemplo a la firma de Wolfsburg, que recientemente pasó a controlar JAC Motors en China y planea reorientar su oferta a vehículos eléctricos.
De concretarse la operación, sería un gran impulso para Lifan, que según medios de prensa asiáticos está atravesando importantes dificultades financieras que limitan mucho sus inversiones y crecimiento en el mercado, con deudas que alcanzarían varios millones de yuanes y dólares. Para peor, la pandemia de coronavirus provocó una fuerte caída en la producción, ventas y exportaciones, especialmente a Rusia, su segundo mercado en importancia fuera de China.
Así, se repetiría la situación que posibilitó a Geely adquirir otras marcas de su holding como Volvo y que viene funcionándole muy bien: rescatarlas económicamente y aprovechar su capacidad técnica y productiva. Pero además, también resultó beneficioso para ellas, ya que no sólo aseguraron su subsistencia, sino que también les posibilitó renovar y ampliar su gama de productos.
Por el momento, no se espera que esto afecte o provoque cambios en Latinoamerica.
Fuente: 16Valvulas